PEMES

Mi nombre es Patricia Colón, Graduada en Educación Social y responsable de proyectos sociales en Concilia2, una consultora especializada en igualdad y conciliación.

El pasado año tuve el placer de formar parte como formadora en los talleres de un proyecto organizado por Mujeres Entre Mundos que contó con la colaboración de Concilia2, en las que ambas entidades unieron sinergias para llevar a cabo  el proyecto “para el empoderamiento de las mujeres en situación de riesgo y exclusión social” el cual está financiado por la Junta de Andalucía, el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad y subvencionada con cargo a la asignación tributaria del 0.7% del IRPF.

La iniciativa de este proyecto nació teniendo en cuenta que el empleo es una de las claves principales para la emancipación socio-personal de las mujeres, puesto que   dan lugar a una independencia y autonomía en la libertad y toma de sus decisiones.

 Y es una realidad que las mujeres se encuentran hoy en día en todos los aspectos en una situación de desventaja con respecto a los hombres, y especialmente en el ámbito del empleo, sobre todo si hablamos de mujeres con especiales dificultades de inclusión laboral.

Es una realidad que ser mujer ya puede ser motivo de vulnerabilidad, pero si le añadimos ser inmigrantes, de una etnia no predominante en la sociedad, orientación sexual diferente, discapacidad, o por si se combinan estas situaciones y da lugar a una o múltiple discriminación, etc. podemos encontramos en una situación de riesgo de exclusión o exclusión social.

Estas discriminaciones Inter secciónales no se trata de “sumar” las discriminaciones, sino de comprender cómo la intersección de esas discriminaciones es algo específico que necesita un abordaje particular que reconozca esos diversos factores, haciendo así un mapa de la realidad de estas mujeres y pudiendo hacer una intervención eficaz.

Por ello nos encontramos con la necesidad de promover la inclusión laboral de la mujer en situación de vulnerabilidad social impulsando la cualificación para que no se concentren en las ocupaciones manuales o de cualificación básica y pueda acceder también a empleos profesionales y cualificados.

 Así el programa contemplaba los siguientes objetivos:

  • Dotar de información actual sobre el mercado de trabajo y proporcionar habilidades para la búsqueda de empleo.
  • Promover el uso de nuevas tecnologías para la búsqueda de empleo.

Mejorar la capacidad de inserción laboral del colectivo de mujeres doble o múltiplemente discriminadas y la mejora de su autoestima.

  • Potenciar su participación en la sociedad a través del empleo.
  • Favorecer la adquisición de competencias enfocadas al emprendimiento, en caso de querer comenzar una andadura laboral propia.

Para llevar a cabo estos objetivos se desarrolló un programa, el cual constaba de 3 talleres diferenciados por módulos el cual se impartían durante 3 días consecutivos con una duración de 4 horas, comprendiendo un total de 12 h.

Los módulos quedaban divididos de la siguiente forma:

Modulo 1: Igualdad de género y empoderamiento

Modulo 2: Técnicas y herramientas para la búsqueda de empleo

Modulo 3: Emprendimiento y autoempleo.

Como colofón y cierre del proyecto  se realizó una Jornada- desayuno empresarial en el que acudieron mujeres asistentes a los cursos y empresas locales donde se intercambiaron impresiones acerca de las realidades laborales y sirvió de nexo a los  empleadores locales.

Los talleres se llevaron a cabo en las ciudades Jaén, Almería y Sevilla.

Jaén

Sevilla

Almería

Jornada desayuno empresarial

Los perfiles de las mujeres fueron variando, inmigrantes, diversidad funcional, disminución sensorial, etnia gitana, etc.

Teniendo en cuenta las necesidades de las usuarias, los talleres constaron de contenido teórico y prácticos través de ejercicios y dinámicas grupales y participativas.

Este tipo de intervenciones dieron lugar a un espacio de reflexión, de apoyo y la compañía en los procesos personales de cada una, en un entorno seguro y agradable lo cual permitió el intercambio de:

  • Historias de vida donde Expresar la experiencia vivida y encuentran un grupo en las que se identifican como iguales.
  • Exteriorizar sentimientos, deseos, dificultades e inquietudes.
  • Entender la conexión de pérdida de salud y calidad de vida personal y emocional
  •  Aprender a administrar un tiempo propio para el autocuidado y el desarrollo personal.
  • Establecer relaciones y redes de apoyo.
  •  Aprender relaciones de buen trato, incorporando el buen trato hacia una misma.
  •  Desarrollar la autoconfianza y la autoestima personal y colectiva.
  •  Elaborar un proyecto de vida propio

Como resultado, las mujeres esbozaron un itinerario de motivación personal.   Trabajando aspectos como motivación y habilidades personales, autoestima, comunicación y empoderamiento. Propiciando la seguridad en sí mismas para iniciar retos personales, laborales y/o sociales, encabezando y siendo protagonistas de sus propias metas.

Todo ello desarrollado desde la perspectiva de la autonomía plena de la mujer en la que es capaz de realizar un análisis de su realidad y proponerse un objetivo que le lleve al estado que desee para su vida, poniendo su capacidad para generar ideas de mejora en su desempeño laboral, mejoras de empleo y autoempleo emprendedor para llegar a dicho estado deseado.

OBSERVACIÓN DE LA REPERCUSIÓN EN LAS MUJERES QUE HAN PARTICIPADO EN LOS TALLERES:

Se identifica claramente 3 momentos en el proceso donde se aprecia la evolución:

1. Empezando por el momento en el que participan, pero no son conscientes, desconfían del proceso y no reconocen su poder de cambio. (actitud pasiva-conformista-abatida)

2. toman conciencia de su situación personal y se plantean un cambio positivo, contemplan como opción las pautas de actuación que se plantean para lograr avances y se muestran participativas, plantean dudas y existe un feedback.

3.  El grupo se erige como un referente de apoyo para la construcción y reconstrucción de vidas que han estado en una situación no deseada por sus propietarias.

Las mujeres participantes toman consciencia de que son mujeres inmersas en una situación compleja y problemática de la que no son culpables y toman consciencia de las posibilidades de mejora que pueden tener, siendo capaces de analizar las situaciones externas a ellas como oportunidades y ser conscientes de las amenazas intentado superarlas desde las potencialidades y fortalezas que poseen.

Personalmente como formadora y como Educadora Social, poder experimentar el proceso de cambio en diferentes colectivos fue una experiencia muy enriquecedora y a la vez inesperada puesto que a pesar de la casuística y las características propias y únicas de cada persona  y de cada grupo, observar el haber propiciado en ellas un impulso al cambio y dotarlas de herramientas para su empoderamiento y el compromiso adquirido por ellas mismas para lograr llegar a su “estado deseado”  me llena de plenitud como profesional.

Puedo decir que me sentí parte de ellas y de su historia en todo momento, debido a que surgió un clima de confianza en el que tanto las usuarias como las profesionales quedábamos en un único bloque. Fue un momento culmen, de ahí nacieron relaciones interpersonales entre ellas que les sirvió como red de apoyo, algo muy importante cuando muchas de las mujeres se encontraban sin relaciones personales, laborales ni familiares en estos momentos de su vida.

Todo esto no hubiese sido posible sin la coordinación y la profesionalidad de la Asociación Mujeres Entre Mundos, que a pesar de su confianza se involucró en el proyecto coordinándose en todo momento para de forma más integral poder dotarlo de posibilidades y evitar que surgiesen necesidades para que saliese a delante.

Tras mi trayectoria profesional tanto como educadora social en el ámbito de la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres, considero que este tipo de proyectos son imprescindibles como apuesta por la inclusión social apostando desde el empoderamiento de cada individuo. Todo ello, desde una perspectiva de género, pues sólo desde él puede comprenderse de forma exhaustiva el porqué de la exclusión de las mujeres.

 El empoderamiento de las mujeres es un proceso en el que se pretende y se consigue la capacidad de configurar sus propias vidas y su entorno, trabajándolo desde la identidad y la autoestima, la autonomía personal, ofreciendo otros ejemplos de feminidad y transformando los modelos del sistema en el que han vivido.

Patricia Colón.